Las hemorroides a menudo son descritas como “venas varicosas del ano y recto”, son masas de tejido vascular aumentadas de tamaño, que se localizan en el ano y la parte baja del recto; existen dos tipos internas y externas,  llamadas así por su localización.

El tratamiento se establece solo después de que se han excluido otras causas de sangrado del intestino inferior, para lo cual se disponen de varias alternativas.

Tratamiento médico.- El objetivo de este régimen es evitar el esfuerzo al evacuar, los síntomas ligeros se alivian con algunos cambios en la dieta y en la educación del paciente para modificar ciertos hábitos higiénico-dietéticos.

Tratamientos ambulatorios sin dolor que se realizan en el consultorio como ligadura con banda elástica, coagulación con rayos infrarrojos, etc.

Tratamiento quirúrgico (Hemorroidectomía).- Esta alternativa es el mejor método para eliminar las hemorroides en forma total y permanente.

Con el tratamiento adecuado, Usted dejará de sufrir del dolor y del sangrado que estas producen, logrado así una mejor calidad de vida.

No hay ninguna relación entre hemorroides y cáncer. Sin embargo, los síntomas de la enfermedad hemorroidal en particular el sangrado, son similares a los del cáncer colo-rectal y otros padecimientos del colon y recto. Asimismo, es muy importante que cualquier síntoma sea diagnosticado por un medico especialista en el diagnostico y tratamiento de las enfermedades del colon, recto y ano.

Un cirujano coloproctólogo se especializa en el diagnostico y tratamiento de las enfermedades del colon, recto y ano.

Cuenta con un completo entrenamiento en el tratamiento de los padecimientos del colon, recto y ano. El cirujano colo-rectal esta capacitado para manejar tanto lesiones benignas como malignas; en todos los casos realiza obligadamente un examen colo-proctológico completo y una rectosigmoidoscopia.

Cuando el padecimiento lo requiere puede intervenir quirúrgicamente.

Le damos atención a: 

• Enfermedad hemorroidal (con o sin cirugía).
• Fisura o ulcera anal.
• Abscesos y fístulas ano-rectales.
• Prolapso rectal.
• Condilomas anales.
• Cuerpos extraños en recto.
• Colitis.
• Cáncer colo-rectal.
• Divertículos del colon.
• Estreñimiento.
• Etc.